El viaje de Iwan: «Sé que puedo venir al JRS Polonia en cualquier momento, y que siempre soy bienvenido»

Antes de la guerra, Iwan era como cualquier otro chico de 14 años en Ucrania. Su mundo giraba en torno a la escuela, los amigos y su rutina diaria. "No tenía grandes obligaciones aparte de aprender", recuerda. Pero cuando estalló la guerra, todo cambió de la noche a la mañana. Se vio obligado a dejar atrás la vida que conocía, emprendiendo un incierto viaje a Polonia.
Un difícil viaje a lo desconocido
Huyendo del conflicto, Iwan subió a un tren abarrotado con destino a Polonia. "Viajé en un tren directo a Polonia con tanta gente que es difícil de imaginar. Al salir al pasillo, se veía que todo el mundo (madres con bebés, niños, ancianas) estaba sentado en el suelo. También puedo decir que había mucha gente en nuestro compartimento del tren, por no hablar de la necesidad de un espacio para guardar maletas y cosas en general", describe.
Cuando por fin llegó a Polonia, fue recibido con amabilidad y solidaridad. "Durante los primeros días en Polonia, me sentí muy atendido, porque al salir del tren me esperaba una multitud de gente con carteles de 'estamos con vosotros', etc. Además, nos dieron comida para empezar y artículos de primera necesidad".
Superar los retos en un país nuevo
A pesar de la calurosa bienvenida, Iwan se enfrentó a grandes retos. No había planeado venir a Polonia y tuvo que enfrentarse a una lengua y una cultura desconocidas. "Estaba sorprendido y no conocía el idioma. En realidad, no sabía ni inglés ni polaco. No sabía en absoluto cómo funcionaba todo en Polonia", admite.
Encontrar apoyo era crucial, y fue entonces cuando descubrió el JRS Polonia. Más que un lugar para aprender idiomas, el JRS se convirtió en su hogar lejos de casa. "Gracias al JRS, conseguí aprender polaco y estoy en proceso de aprender inglés. He conocido lugares preciosos en Varsovia y sus alrededores y he encontrado colegas. Actualmente, participo en reuniones de jóvenes e incluso las organizo. Ahora sé que puedo venir aquí en cualquier momento y que siempre soy bienvenido", dice agradecido.

Construir un futuro con esperanza
Cuando Iwan mira hacia delante, su futuro sigue siendo incierto, pero está decidido a seguir adelante. "Sí, conseguiré lo que he planeado. Si tengo suficientes conocimientos y cualificaciones. Me gustaría quedarme en Polonia más tiempo, a menos que cambien las condiciones, pero en general me gusta mucho estar aquí. Aquí tengo amigos, algo de familia, estudio, trabajo, etc.". Con el apoyo del JRS Polonia, Iwan ha encontrado no sólo ayuda, sino una verdadera comunidad que cree en él.
Únase a nosotros para apoyar a miles de personas como Iwan
El JRS trabaja junto a la Red Xavier, Concordia Moldova, la Compañía de Jesús en Europa, la sociedad civil local y las ONG en una respuesta jesuita coordinada. Juntos ayudamos a miles de personas como Iwan. Puedes leer más sobre La Única Propuesta: la respuesta coordinada de los jesuitas para apoyar la crisis de Ucrania.