25 años creando y creyendo junto a ti, y seguimos
Recordamos en estas fechas los 25 años que llevamos en Alboan caminando junto a ti. Creando oportunidades, creando y creyendo en un mundo más justo que no sólo es posible sino que y sobre todo, es necesario. Y aunque no es fácil recrear hoy nuestros primeros pasos, somos un grupo de personas agradecidas a otras que nos han precedido e inspirado.
Cómo no recordar hoy en el primer aniversario de su fallecimiento a Santiago Manuin, líder indígena awajún que nos acompañó aún recién nacidos en su territorio de Santa María de Nieva en la amazonía peruana. 25 años después reconocemos ese corazón responsable de Santiago y de su pueblo como nuestro primer corazón. También y cómo no el de los jesuitas misioneros en Venezuela, Centroamérica, Congo y Gujerat en India. Ellos han inspirado y siguen inspirando nuestros pasos. Javier Arellano y Álvaro Martín, y después Nacho Eguizabal y María del Mar Magallón supieron interpretar los cambios exigentes que se estaban dando en el horizonte de la cooperación y la justicia –de las luchas contra las injusticias- que entonces era mundial y ahora llamamos global. Fuimos desde el comienzo diversas: jesuitas y laicos, mujeres y hombres, jóvenes y mayores. Desde el comienzo soñamos, pero también desde ese primer momento nos tomamos muy en serio nuestros sueños.
Tender puentes: la puerta que se abre hacia una ciudadanía global
Quisimos desde un comienzo tender puentes entre mundos en aquel momento lejanos y desconectados y nos encontramos poco a poco con los sures globales, con el cuidado de la casa común y la sostenibilidad social y medioambiental, y en seguida también con las personas migrantes y refugiadas y la dignidad de sus causas justas. Nos encontramos con un único mundo y con un único horizonte de humanización y de solidaridad. Y desde el comienzo también pusimos en diálogo todos estos aprendizajes con nuestra espiritualidad, la ignaciana que viene de nuestra tradición jesuita. Y en su nombre, en el de la Compañía de Jesús en la Provincia de Loyola primero y en la de España ahora, hemos ido tejiendo complicidades con las redes jesuitas para la justicia: el JRS para las personas refugiadas y los SJM para las migrantes, la Red Fe y Alegría y la Red de Gujerat de educación popular transformadora, los centros sociales jesuitas en América Latina, África y Asia para el desarrollo económico alternativo y para la participación social.
Mirando atrás son muchas las fronteras en las que nos hemos encontrado con todas vosotras y vosotros. Hemos aprendido que esos lugares de frontera, físicos y sociales, no son sólo lugares de confrontación y sufrimiento. Son, además, lugares de construcción de dignidad y humanidad donde merece la pena permanecer. Allí hemos contemplado y compartido el testimonio de personas y organizaciones en la difícil y exigente tarea de tender puentes hacia la justicia y hacia la reconciliación. Sin poder nombrar todas esas buenas noticias, que han sido muchas, recordamos algunas de ellas: el desarrollo del voluntariado internacional ignaciano VOLPA y de la Red de Jóvenes de Alboanen Gazte Sarea; la integración en Alboan de los secretariados de misiones de Fe y Alegría y Gujerat; los programas educativos como Munduko Herritarrok-Ciudadanos del Mundo, ANKUR, Mugetatik Haratago- Más allá de las Fronteras o Coeducación - Hezkidetza; las campañas de Tecnología Libre de Conflicto o la de Mujeres en Marcha; y constituimos, junto con otros otros muchos centros sociales y universidades jesuitas la Comunidad Comparte de alternativas económico-productivas para la justicia social y ambiental.
Trabajamos junto con otras organizaciones sociales en el horizonte de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y ahora lo hacemos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, las Cumbres en Defensa del Medio Ambiente o contra el Cambio Climático. Hemos tenido y seguimos teniendo vuestro apoyo como personas voluntarias, grupos colaboradores, empresas y personas socias donantes. También las administraciones públicas con las que hemos caminado ya un largo trecho colaborando como ciudadanía organizada y crítica en la creación y sostenimiento de las políticas de cooperación y educación para la ciudadanía global que hoy son seña de identidad de bien común y de participación en nuestras sociedades. Y hemos contado también con personas muy valiosas que han desarrollado sus capacidades profesionales al servicio de nuestra Misión. A todas vosotras, las que estuvisteis y las que hoy estáis, gracias por construir una comunidad de solidaridad allí donde habéis llevado la misión de Alboan y habéis sido y sois Alboan.
(FOTO: Martín Iriberri, Mary Tere Gúzman y Javier Montes, adjunto a dirección, durante una jornada de trabajo).
Hoy estamos comprometidos con nuestra organización hermana Entreculturas en un proceso de marco estratégico común que vuelve a renovar nuestro compromiso compartido en torno a las causas justas del derecho a la educación, la vida digna en situaciones de movilidad humana, la justicia medioambiental, la ciudadanía y la participación y la equidad de género. Contamos contigo para que sigas caminando a nuestro lado, ¡dejadnos caminar a vuestro lado hasta la siguiente colina soleada!
Así que aunque no lo hubiéramos creído hace 25 años aquí estamos en 2021 urgidas por la realidad real que, en palabras de Ignacio Ellacuría, nos piden que nos hagamos cargo de la realidad, cargando y encargándonos de ella. Patxi Álvarez, compañero jesuita todos estos años de aventura, nos regaló hace unos meses un decálogo para los próximos años:
- descentramiento como camino de crecimiento humano,
- las víctimas en el centro,
- universalidad como procesos que impacten en nuestro mundo
- búsqueda del mayor bien común,
- implicarnos en dinámicas y en procesos y no fijarnos sólo en los resultados,
- descubrir las causas e ir a la raíz,
- desenmascarar los mecanismos de muerte,
- buscar los signos de esperanza, poner las cosas en relación y dotarlas de sentido
- mirar contemplativamente la realidad, asombrándonos y admirandola.
Gracias de corazón y seguimos.
Martín Iriberri SJ
(FOTO PRINCIPAL: Martín Iriberri, Mary Tere Guzman, y Dani Villanueva comparten liderazgo en este momento retador e ilusionante que Alboan vive).