ParticipAcción Juvenil: una nueva ciudadanía desde la participación organizada

Sabrina Burgos coordina y acompaña el programa PartipAcción de Fe y Alegría Colombia

ParticipAcción Juvenil es una propuesta para la acción dirigida a jóvenes de entre 13  y 25 años de los sectores más desfavorecidos de Colombia que proporciona formaciones y acompañamiento para avanzar en procesos de participación social y ciudadana.  En 2017 tomaron parte casi 2000 jóvenes vinculados tanto a colegios, como a los centros comunitarios de Fe y Alegría.

¿Qué tipo de participación es la que queréis conseguir con este programa?

SABRINA BURGOS: Al hablar de participación pensamos en que la juventud sea capaz de desarrollar espíritu crítico y que cuente además con herramientas para hacerlo. Para ello desplegamos tres líneas de acción:

• Itinerario formativo orientado a fortalecer capacidades ciudadanas (de participación social) que les ayuden a la hora de movilizarse como por ejemplo los  Derechos Humanos,  desarrollar mirada crítica etc.
• Acompañamiento a personas y a colectivos juveniles tanto en el marco de los procesos de Fe y Alegría, como otros casos que requieran algún tipo de asesoría (para elaborar un proyecto o una asesoría).
• Acciones de movilización. Tiene que ver con acciones concretas, compartir experiencias o poner en marcha campañas alrededor de una temática que les interesa realmente, pero llevando a cabo un auténtico ejercicio de ciudadanía.

¿Cómo se pone en marcha una acción de movilización?

S.B.: En primer lugar llevan a cabo un análisis del contexto. En este sentido ParticipAccción ahora mismo se encuentra en una fase de indignación en el sentido de no aceptar lo inaceptable. A través de los lenguajes artísticos y deportivos inician un diálogo con el resto de la comunidad para poner sobre la mesa qué es lo que les duele de su contexto, y también para entrar en contacto con otros grupos y actores de esos temas.

¿Cuáles son sus formas de expresión favoritas?

S.B.: Son personas muy creativas y han encontrado en el arte y la cultura una forma de expresión muy valiosa. Además con sus acciones le aportan al arte un valor añadido, ya que en sus manos se convierte en herramienta de comunicación para expresar situaciones difíciles y muy complejas. Una de las formas de expresión que más utilizan es el teatro, concretamente el teatro de oprimido, que busca conseguir una acción de transformación a través de un proceso participativo. Esta técnica les ayuda a visibilizar el camino para el cambio y las diferentes alternativas que se pueden encontrar en él mismo. La música es otra de las herramientas que utilizan, como es el caso de Alto Volumen. Este grupo se vale de la música para hablar de los temas que les interesan y están expandiendo un mensaje muy importante: las buenas personas somos más. Alto Volumen coordinaba además el centro cultural de  Fe y Alegría en Cali.

¿No se cansan? ¿Cuál es el horizonte de estos grupos?

S.B.: Dentro del proceso se contempla el relevo generacional. Por ejemplo en Bogotá hay un grupo que comenzó con un programa de radio escolar, Nacho Stéreo. En este espacio realizan incidencia política. El grupo que la puso en marcha ya ha finalizado sus estudios y ahora continúan su labor en el proyecto formado a jóvenes para que continúen el proyecto.