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Jóvenes de Gujerat construyendo futuro

Gujerat

Misión de Gujerat-Alboan han puesto en marcha esta primavera una iniciativa para apoyar el desarrollo de las comunidades adivasis de Valsad, en el sur de Gujerat. La zona donde se lleva a cabo el proyecto de formación e inserción laboral de jóvenes adivasis se caracteriza por la presencia de bosques, montañas, colinas y terreno rocoso. Se trata de un entorno rural que carece de infraestructuras y que no está bien comunicado.

 

En el año 2021 el jesuita James C. Dabhi sj. llevó a cabo una investigación con la ayuda del Centro de Cultura y Desarrollo de Sevasi de Baroda sobre las razones que subyacen detrás de los movimientos migratorios estacionales que se dan en la región. El estudio analizaba además la situación que acompaña tanto a las personas migrantes en su lugar de trabajo, como a sus familias, que se ven afectadas, especialmente en lo tocante a la educación de sus hijos e hijas, que no siempre tienen ocasión de continuar con sus estudios. De la investigación se concluyó que los habitantes de las aldeas de la región emigran para ganarse la vida a distritos colindantes y al cercano estado de Maharashtra. En la zona se ha planeado la construcción de sendas presas aprovechando el curso de los ríos Par y Nar, que afectará a más de 30 pueblos que quedarán sumergidos y muchas familias se verán afectadas y desplazadas sin recibir compensación económica. A todo ello hay que sumarle que la población local ha sufrido mucho por el paso de la pandemia. El confinamiento les impidió salir a trabajar, lo que les ha colocado en una situación de extrema vulnerabilidad por la dificultad de conseguir fuente de ingresos estable.

 

La juventud es un momento vital muy importante y delicado. Se trata de una época de cambios y de toma de decisiones trascendentes en la vida de las personas, por lo que es necesario acompañarles y ofrecerles alternativas para que enfrenten la entrada en la edad adulta con herramientas para tomar las riendas de sus vidas. Frente a la apatía y el desaliento Misión de Gujerat-Alboan apuesta por proporcionarles oportunidades para cambiar sus destinos y el de sus comunidades. Es esencial atender sus necesidades y ayudarles a crecer y a vivir una vida con sentido. Durante las visitas a las aldeas, hemos comprobado que, debido a las escasas oportunidades de conseguir empleo, en muchas ocasiones se entregan a los malos hábitos, como el consumo de alcohol, que desembocan en malas relaciones familiares y genera problemas de convivencia en sus casas y en sus vecindarios.

Programa de formación laboral y emprendimiento para jóvenes

La población juvenil de la región carece de formación adecuada y durante los dos últimos años marcados por la emergencia sanitaria, han permanecido en sus hogares sin perspectivas de futuro. La ausencia de motivación es un peligro que pretendemos atajar a través de la puesta en marcha de módulos formativos para el acceso a empleo en áreas tales como: fabricación de ladrillos, gestión hotelera, carpintería, albañilería, pintura, etc. La iniciativa que presentamos pretende poner freno a la problemática laboral que enfrenta la juventud de la región, mediante la generación de autoempleo. Para ello se ha seleccionado a un grupo de 40 jóvenes adivasis de la región, mujeres y hombres, a los que, divididos en dos grupos, se les proporcionará formación durante un mes para aprender la técnica de fabricación de ladrillos. En paralelo está previsto organizar talleres de sensibilización dirigidos a población juvenil que actualmente está desocupada y que no participa en ningún espacio comunitario.

 

El objetivo principal del proyecto no se limita a la formación para el empleo, sino que  pretende animar las iniciativas de autoempleo, canalizando y potenciando las capacidades y talentos de las personas participantes. Por eso, una vez concluidos los espacios formativos se les animará y acompañará para que puedan replicar el proceso con otros jóvenes de su zona. Para poner en práctica esta iniciativa un líder local ha cedido terreno de su propiedad en el que ya han comenzado  a realizarse las formaciones y la fabricación de ladrillos.

 

La iniciativa de la que hoy nos hacemos eco es modesta y puede parecer no demasiado ambiciosa, pero encierra un enorme potencial, ya que tenemos la convicción que este pequeño grupo de cuarenta jóvenes podrá replicar su experiencia y animar a muchas más personas en sus comunidades.

“Mucha gente pequeña en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas puede cambiar el mundo.”

 

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